Los aspirantes no pueden asumir las entradas del 20% o no consiguen hipotecarios
levante-emv.com – Resultar agraciado con una vivienda protegida en un sorteo público no es una suerte, hoy por hoy. A las dificultades para acceder a unas cuantas VPO que los ayuntamientos promueven, entre cientos o miles de aspirantes, se añaden ahora otras como un descenso en los ingresos de muchos jóvenes, el aumento del precio del módulo con el que se calcula el valor de la vivienda, las dificultades para entregar el 20% del importe total que exigen los constructores antes de la firma de la escritura o las trabas que ponen las entidades bancarias para conceder los préstamos hipotecarios.
El resultado ya se ha dejado notar: en los últimos meses, más de 200 jóvenes han renunciado en la provincia de Valencia a las VPO que les habían sido adjudicadas en diferentes sorteos y promociones.
Uno de los casos más significativos se ha producido esta semana en Algemesí, en la Ribera Alta. De las 36 viviendas que el consistorio sorteó en julio, unos 30 agraciados renunciaron y también todos los aspirantes que estaban en la lista de espera, por lo que tuvieron que volver a rifarse esta misma semana, en un acto con escasísima concurrencia de interesados. La promoción se compone dos edificios de viviendas en la zona de El Pla, y que están actualmente en proceso de construcción.
Los precios oscilan entre los 155.000 y 149.000 euros, incluyendo plaza de garaje y cuarto trastero.
Alaquàs, a la cabeza
Otro ejemplo es el de Alaquàs, en l’Horta Sud, donde en lo que va de año ha habido más de 70 renuncias. Si bien esta población ha sido una de las que lideraba la promoción de VPO en la zona -ya se han sorteado y están en construcción casi 400-, las renuncias se han multiplicado en los últimos tiempos. En el sorteo de más de 100 pisos en abril hubo 32 renuncias, cuyas viviendas volvieron a sortearse en julio. Los precios oscilaban entre los 120.000 y 180.000 euros. En el segundo intento ser han registrado 22 renuncias más. Asimismo, en los anteriores sorteos se habían producido una veintena de rechazos.
En Rafelbunyol -l’Horta Nord- donde hace varios meses se sortearon 140 viviendas, 30 adjudicatarios ha renunciado, lo que supone un 20%. La otra decena de rechazos de pisos ya adjudicadas se distribuye entre Torrent y Paterna de sorteos de hace meses.
En Sagunt, tres de las principales promotoras han visto cómo el endurecimiento en las condiciones bancarias impedía a compradores en firme asumir la adquisición de sus casas. La firma que impulsa 42 VPP junto al hospital de Sagunt, ha contabilizado cuatro renuncias en el último momento a una casa de 65 m2 -sin trastero ni garaje- que costaba unos 110.000 euros. En parecida situación se encontró un comprador de otra vivienda protegida que un precio de 130.000 euros. Cuando fue a subrogar el préstamo, la entidad bancaria le denegó la hipoteca.
Los mismos problemas se han trasladado a la zona de Fusión, el PAI que unirá físicamente el núcleo histórico y el Port de Sagunt. Según la promotora los problemas a la hora de obtener un crédito bancario obligaron al 30% de los inscritos a desistir de ocupar una de las 78 viviendas promovidas.
En Llíria, diecisiete de los 84 vecinos adjudicatarios renunciaron en julio a sus VPO, la mayoría de ellos por no poder afrontar el pago inicial del 20% del valor total del inmueble al que les obligan las bases de la adjudicación. Los precios oscilaban entre 91.000 y los 143.556 euros ya que se habían aplicado los antiguos módulos.
En Xàtiva, la crisis y el retraso en las obras ha echado atrás a un 20% de beneficiarios de las VPO de Xàtiva que sorteó el ayuntamiento un mes antes de las elecciones municipales de mayo de 2007. Segu?n la informacio?n facilitada por el consistorio, de los 40 inscritos, so?lo 22 han presentado la documentación en regla. De las 18 ausencias, hay algunos que no cumplen los requi sitos y habrán de ceder su opción de compra, pero hay al menos ocho renuncias voluntarias.
larepublica (6.10.2008)
