“La demanda, más o menos sorda, en las filas del PSOE, a favor de que el Gobierno contribuyera a embridar lo que se entendía como deriva soberanista por parte del PSC y, con él, de la mayoría abrumadora del Parlamento en Cataluña era mayor incluso de la que trascendió a la opinión pública”.
Así lo explica Jordi Sevilla, que fue ministro de Administraciones Públicas durante la negociación del Estatuto de autonomía de Cataluña, en el libro Vertebrando España que acaba de ser publicado por la Fundación José Ortega y Gasset.
Según el diputado socialista, el Gobierno intentó que fracasara en el Parlamento autonómico de Cataluña el proyecto de Estatuto por la deriva soberanista de una parte del PSC, encabezada por Pasqual Maragall.
Relata cómo las posiciones de Maragall entorpecían las conversaciones y cómo, por el contrario, fue vital la incorporación al Gobierno de José Montilla. Sevilla se felicita del resultado, pero describe la descoordinación inicial en la negociación: “Había demasiada gente interviniendo y no siempre se respetaba la sombra del compañero”. El ex ministro contactó con Josep Piqué, entonces líder del PP catalán, para incorporarle al acuerdo, pero Rajoy frustró el intento.
La voz de Barcelona (3.07.2009)
