Esta mañana he escuchado a Albert Rivera en Onda Cero. Decía que los problemas de los españoles eran la regeneración política, la corrupción, el sistema electoral, etc. Hombre desde luego, pero también el saqueo de los derechos sociales, laborales. Si alguien se olvida de eso, además de olvidar el dolor de los españoles incluidos los catalanes, se incapacita para aglutinar una verdadera respuesta al delirio que vivimos. Ese camino probablemente fracase a medio plazo. Porque es posible que sea más de lo mismo.