Y estaban todos: personas y organizaciones que dicen representar a las fuerzas vivas catalanas. Mal va la clase trabajadora de Catalunya si va detrás de esta pandilla de beneficiarios y avaladores del robo. Mal va la construcción de la España federal que dicen defender algunos lacayos del independentismo presentes en la reunión.
Ante la continuación del aquelarre en el que entre palabra y eructo se jactan de lo valientes que son al desafiar a la ladrona España. Se abrazan y besan Puigdemont, Ada Colau, Carme Forcadell, Gerardo Picharello, Lluís Rabell, Lluís Llach, Dante Fachín, Xavier Domènech, Romeva, Joan Carles Gallego, (en que cloaca ha bajado CCOO con personajes como éste), Nuet y Carme Forcadell. Y aquí me paro, todos los nombres son públicos. Puigdemont ya ha nombrado de entre ellos a 8 estrategas del “dret a decidir” para que vayan abriendo camino.
Catalunya está actualmente en manos de los ladrones y cómplices para hacer un referéndum de independencia que libere definitivamente a “sus ladrones”, de la ley. La reunión del 23 no era para analizar la situación social de millones de catalanes que han visto como se reducían sus salarios y servicios, no porque España les robaba, sino porque les robaban sus gobernantes privatizando empresas y servicios sociales y recortando derechos.
La reunión tampoco era para poner en marcha la recuperación de los miles de millones robados por la mafia pujolista durante años, e iniciar un proceso de mejora de las condiciones de vida hasta que los niños puedan comer helado diariamente.
Ni para luchar contra las políticas neoliberales en España, impulsadas por los poderes económicos, en las cuales los gobiernos de Catalunya habían sido pioneros.
Y mucho menos para hablar de la muerte y destrucción que generan las guerras, de los inmensos recursos que se gasta en ellas y de la responsabilidad del PDC, (antigua CDC-CiU), o de ERC, que comparten toda la política de la OTAN y de sus aliados sionistas de Israel.
La reunión para unos era ver cómo un referéndum por la independencia les daba derecho de pernada sin oposición para continuar las mismas políticas neoliberales y de pasada hacerse una fortunita, y para que los de la “izquierda sindical y política conservadora” que no paran de lamer las botas independentistas tengan un papel auxiliar subalterno y cuatro cosas secundarias de carácter social.
A mí lo que hacen las derechas catalanas y españolas no me quita el sueño porque es la política de la derecha de siempre, que se debe combatir y arrancarle todas las mejoras posibles en las condiciones de vida y de trabajo, hasta que algún día un pueblo más sabio y valiente que el actual, los mande definitivamente al carajo de la economía, de la política y de la historia.
A mí lo que me preocupa y crispa es ver a los teóricos representantes de la izquierda sindical y política lamer las botas de los amos independentistas, por el hecho de que son los amos que tienen poder y dan las subvenciones y porque ellos ya no mantienen ningún rescoldo de la ética y dignidad de antaño.
Cuesta entender tanta subordinación moral y política de los Domènech, Colau, Rabell o Nuet. Y tanta subordinación a este mal aquelarre por parte de las direcciones del PCE y de IU, al servicio de Nuet, Domènech, Rabell o Colau.
Con pereza y aburrimiento hablo de esto porque tocaba hacerlo, aunque sea una historia tan mediocre sobre un camino a la nada.
Yo he votado siempre al que tocaba, fuera Anguita, Centella, Romeva o Garzón. El 20 D de 2015 voté a Garzón porque después de la patada que le dio Iglesias en nuestro culo, por un momento IU recuperó política y discurso e hizo una buena campaña. El 26 de junio pasado dejé de votar por primera vez. Y continuaré así, no tengo referente electoral ni me siento representado por nadie de los que se auto otorgan el título de izquierdas.
Una de las razones por la que hace años que «paso» de la «izquierda» es su enfermiza obsesión con Israel, no importa de lo que se hable, la coletilla siempre sale.
Antes en los 60 era lo contrario, mi padre ,mis tios, sus amigos, hablaban de política y admiraban a Israel, en el colegio y luego en el trabajo tambien estábamos a favor de Israel, la tele y la radio franquista no, eran pro-árabes (la tradicional amistad de España y los países Arabes) decían, y hay que recordar que dos naciones México e Israel, no reconocían a Franco, que no se olvide.
Fué de vergüenza el veto a la carroza de los gais israelíes, el día del orgullo gai en Madrid hace unos años por los mismos que callan las atrocidades que se cometen con los homosexuales en los países árabes.
El año que viene en Jeruralem.
Shalom
Excelente párrafo : «Catalunya está actualmente en manos de los ladrones y cómplices para hacer un referéndum de independencia que libere definitivamente a “sus ladrones”, de la ley. La reunión del 23 no era para analizar la situación social de millones de catalanes que han visto como se reducían sus salarios y servicios, no porque España les robaba, sino porque les robaban sus gobernantes privatizando empresas y servicios sociales y recortando derechos.»
Paco Frutos, de nuevo, dando en la diana