La oposición autonómica critica la reforma, en época de crisis, que solo beneficiará a los más ricos, y dejará a la Generalidad sin unos ingresos mientras lleva a cabo recortes
CiU y PP han aprobado la eliminación del 99% del Impuesto de Sucesiones en Cataluña. Si los nacionalistas se apoyaron en el PSC (que se abstuvo) para que Artur Mas (CiU) fuera elegido presidente autonómico, ahora, el segundo gran pacto de CiU es con el PP.
El Parlamento autonómico ha aprobado (80 votos a favor y 53 en contra), este miércoles, por lectura única -decisión que ha sido criticada por todos los grupos menos el PP-, gracias a los votos de los grupos nacionalistas y conservadores, y de Joan Laporta, la supresión de Sucesiones; mientras que el resto de formaciones políticas (PSC, ICV-EUiA, ERC y Ciudadanos) han votado en contra.
La norma aprobada supondrá que, de manera retroactiva desde el pasado 1 de enero, y hasta el tercer grado de parentesco (entre hijos, padres y cónyuges; sobrimos y primos continuarán pagando), solo se pague el 1% del Impuesto de Sucesiones. También se podrá suprimir el Impuesto de Donaciones, siempre que la situación económica de la Generalidad lo permita.
Andreu Mas-Colell, consejero de Economía y Conocimiento, ha valorado esta decisión en una pérdida de ingresos para la Generalidad de Cataluña de 52 millones de euros al año -aunque Artur Mas cifró la pérdida, a primeros de abril, en más de 100 millones de euros-. Algo que para el consejero autonómico será una pérdida “limitada”, teniéndola en cuenta con los 542 millones de euros tras la anterior reforma aprobada por el tripartito. “Si esa renuncia de ingresos estaba justificada, se hace difícil entender que esta no lo sea”, ha señalado Mas-Colell.
400 millones de euros y “no” 52
Por parte del PP, José Antonio Coto ha defendido la posición de los populares y su apoyo a la propuesta de CiU. Pese a que para el diputado autonómico la medida es “descafeinada” y “light” han apoyado a los nacionalistas. El PSC ha pedido, sin éxito, al consejero autonómico que retrase la aprobación de esta reforma un año, fecha en la que se espera una mejoría para las arcas públicas autonómicas. Rocío Martínez-Sampere (PSC) ha calculado en 400 millones de euros menos de ingresos “y no de 50″, como ha señalado Mas-Colell.
El resto de formaciones -a excepción de Joan Laporta- han criticado la medida aprobada por los dos grupos de derechas en la Cámara autonómica. La posición de ICV-EUiA la ha defendido Laia Ortiz; la de ERC, Sergi de los Ríos; y la de Ciudadanos, Jordi Cañas. Todos han señalado que esta medida beneficia a muy pocos y choca con los recortes que se llevarán a cabo en la Generalidad durante los próximos años.
Mientras el Parlamento autonómico aprobada la práctica supresión de todo el Impuesto, 50 miembros de la Plataforma para una Fiscalidad Justa, Ambiental y Solidaria protestaban a las puertas de la Cámara para rechazar la reforma. A su vez, 200 trabajadores del transporte sanitario y 50 trabajadores autónomos han protestado contra la clase política también a las puertas del Parlamento autonómico.
La voz de Barcelona (1.06.2011)